Bueno, empecemos.
Pakus es una marikona gaseosa, y en su día sacó el Wendler. A mí me ponía mucho, y tras hacer dos auditorías económicas para ver si me lo podía permitir, se lo compré.
Tiempo después, Pakus me comentó que le interesaba recuperar el Wendler, si era posible. Yo le dije que no tenía pensado sacarlo, y al principio me costó hacerme a la idea de sacarlo, pero dado que en su momento me facilitó muchos aspectos con el Wendler, y que creo que es muy buena gente, le dije que escuchaba ofertas, pero que me interesaba cambiar, no vender. Y buscaba algo de corte modernete también, de cierto nivel.
Total, que él tenía un Fender a la venta, un P51, y me dijo que le habían propuesto un cambio por un Merlos de 5 cuerdas. El plan era que yo el cambiaba el P51 por el Merlos, y yo le diese el Wendler a cambio de el Merlos.
Al principio le estuve buscando fallos para convencerme de que el Merlos no me molaba, pero es que era un bajo que me cuadra mucho. Quedaba pendiente que la semana que viene, al volver a Madrid, probase el Merlos, aunque fuese algo puramente protocolario, yo ya estaba convencido casi del todo. Si todo salía bien, yo ya habría cambiado el p51 por el Wendler, y si me molaba el Merlos, se lo cambiaría por el P51 y todos contentos.
Pero ayer nos manda un mensaje el chico del Merlos a ambos diciendo que lo siente, pero que se queda el Merlos, y añadiendo que espera que comprendamos la situación.
Todo esto, mientras estaba en Burgos, con un colega bajista al que había pedido consejo sobre el tema, y no me lo creía.
Lo dicho: otra vez será.

El GAS, como la energía, no se crea ni se destruye, solo se transforma.