
Total, que los candidatos debían cumplir el hecho de ser portables, no abultar mucho porque tendría que tenerlo en mi despacho plantao, tener suficiente volumen para bolos y que no necesitasen un desembolso económico excesivo (rata viva de Wallapop). A parte de hacerme pajas mentales con Trace Elliot Commando, que aún no siendo portable cumple el resto de condiciones, me llamaban mucho los Fender Rumble 100 y 200. El 100 me daba miedo que se quedase corto, y del 200 había pocos en segunda mano y normalmente se me iban de precio, pero creía que podía ser un buen candidato: me gusta el sonido del Rumble 500 y usan mismo previo, me gustan los 15". ¿Qué podía salir mal?
Pues ayer tuve la ocasión de catar uno nuevecito en los locales por horas y... tremenda decepción. Como llegué el primero al local, pude trastearlo un poco y conseguir una buena eq y buen sonido, pintaba bien la cosa, pero cuando empecé a probar los pedales se vino la debacle. No sé porque razón al meter el overdrive o el Big Muff se iba abajo el volumen y la presencia y rajaba mucho el sonido, como si el altavoz no aguantase la distorsión. Sin embargo, usando el overdrive propio del ampli sonaba genial. Poco a poco me di cuenta de que le sentaba fatal tener una alta ganancia de entrada. encima no tiene led para saber cuando clipea. En alguna canción de la que uso el Muff no pude meterlo porque me quedaba sin sonido, literal, y llevo la señal mezclada, no me ha pasado en ningún otro ampli, ni siquiera en los Rumble 500. Fue bastante extraño...
Luego para rematar, el local en que nos pusieron ayer lo acababan de acondicionar para ponerlo por horas y tenía una acústica terrible, así tampoco pude acerme una idea de cómo de bien o mal rinde a nivel ensayo en limpio, pero solo con esa extraña reacción a los efectos en la entrada del ampli, ya me hacen descartarlo por completo como futuro ampli